lunes, 16 de mayo de 2011

Pan de Azúcar se puso a tiro

Solo 45 minutos bastaron para que Pan de Azúcar le ganara a Aiguá, en partido correspondiente a la tercera fecha del grupo N del Campeonato Nacional de Clubes.

En tan solo un tiempo el elenco Rojo anotó los 4 goles con los que derrotó a la visita por 4 a 1. Abrió la cuenta para el local a los 3 minutos Marcelo Ramos, mediante la ejecución de un tiro libre, que remató con calidad para que el balón ingresara en el ángulo del arco defendido por el guardameta Ángelo Aguirre. Este gol tempranero puso la cuota de tranquilidad para los dirigidos por Fabio Martínez y le paso la responsabilidad a la visita, al cual le urgía ganar.

El encuentro se fue tornando de ida y vuelta, pero quien se arrimaba con mayor peligro era el local. No fue sino hasta el minuto 45, cuando un mal despeje de la defensa blanquinegra encontró bien posicionado a Marcelo Martínez, que saco un zapatazo que dejó inerte al meta visitante para anotar el segundo gol de Pan de Azúcar.

Cuando aún se mantenía el gol de Martínez grabado en la retina y transcurrían minutos de descuentos, Héctor Larrosa convertía el tercero.

Dos minutos más tarde, una corrida por derecha de Adrián Álvarez, quien elude al guardameta para centrar y encontrar la cabeza de Marcelo Ramos, para que anotara el segundo tanto personal y cuarto del encuentro.

Con el 4 a 0 a favor del local se fue el primer tiempo.

El complemento transcurrió sin muchas novedades, donde Pan de Azúcar se sentía ganador y Aiguá con más corazón que fútbol trataba de acercarse tímidamente para aminorar el saldo negativo de goles.

Fabio Martínez comenzó a mover el banco de reserva, para darles rodaje a algunos jugadores lo que fue provocando una merma en ataque.

A los 69 minutos Gabriel Pacheco en una jugada misteriosa, en el cual el árbitro del encuentro, Washington Maseira, cobro gol a favor de la visita sin que el line man, Jean Paul Pereira, se diera por enterado de la jugada.

En definitiva, Pan de Azúcar se llevó tres puntos merecidos, porque fue quien más propuso sobre el terreno de juego, mientras que Aiguá se desconcentró y quedó sin piernas muy rápido lo que provocó la seguidilla de goles sobre el final del primer tiempo.